En los últimos años el número de mujeres ha ido aumentando en el sector emprendedor. Cada día hay más mujeres que se lanzan a la aventura de emprender decididas a cumplir su sueño, aunque por el momento, únicamente representan el 17% del sector emprendedor según un informe de Startup Spain.
La dificultad de combinar trabajo y familia es uno de los principales problemas que se encuentran las mujeres tanto para emprender como para ascender en un puesto laboral, pero hoy os demostramos que es posible saltarse cualquier barrera u obstáculo. Os damos a conocer algunos ejemplos de mujeres emprendedoras o mumpreneurs:
El primer caso es el de Carlota Pi, co-fundadora de HolaLuz y madre de tres hijos. La despidieron del trabajo cuando volvía de una baja por maternidad y decidió “que nunca más trabajaría para nadie que no fuese yo”.
Otro caso es el de Anna Sala, que compagina la medicina con la emprendeduría. Es cofundadora de Adan Medical Innovation, que ha creado AnAPPhylaxis para facilitar la vida de los que sufren por alergias. Presentaron el proyecto y “fui a Silicon Valley entre el segundo y tercer mes de embarazo sin decir nada. No quería que nadie me tratase diferente”. Sin duda es otro claro ejemplo de que se pueden combinar la carrera profesional con la maternidad, “pero con mucho esfuerzo y durmiendo poco”. Cuando surge la oportunidad “no puedes decir que no y esperar a que tu hija sea más mayor”.
La fundadora de Sushifresh también es un buen referente: Sara Serantes. Se le ocurrió la idea cuando estaba de viaje en Nueva Zelanda con su pareja. “De vuelta llegué con 26 años, embarazada” y por eso apartó la idea durante un tiempo ya que “si llevas traje y corbata no tienes ningún problema, pero una mujer joven embarazada…todo el mundo me dijo que no” y únicamente consiguió el Enisa. Así que, cuando se le acabó la baja maternal, retomó la idea. Se apuntó a programas de emprendedores y “a las primeras reuniones iba con el carrito”.
Su startup empezó cuando su hija tenía 4 meses y se abrió cuando tenía 16. Nada consiguió parar sus sueños, de hecho, ha sido madre por segunda vez y asegura que “trabajar para ti es una ventaja enorme. Los niños tienen médico, festivales…y yo puedo montármelo casi siempre”.
Finalmente hablamos de Anna Cejudo, fundadora de IdeaFoster. “Me quedé embarazada cuando hacía poco que habíamos fundado IdeaFoster” y durante los cuatro meses de baja por maternidad intentaba seguir trabajando en en los momentos en que su hijo dormía. Cejudo siempre buscaba alternativas para poder cuidar de su hijo sin dejar de trabajar en la empresa y reconoce haber hecho Skype con la cámara desactivada porque le estaba dando el pecho.
En definitiva, estos ejemplos demuestran que las mujeres pueden ser emprendedoras y madres a la vez. Siempre se pueden buscar nuevos recursos y aprovechando las nuevas tecnologías, incluso se puede trabajar desde casa.
¡Sí, ser mumpreneur es posible!